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domingo, 18 de octubre de 2015

La mémoire d'une ombre (Capítulo 6 "Sorpresas")

Capítulo 6.- “Sorpresas”

-¿No crees que han estado mucho tiempo en la mansión de Thomas?- Siento como el cuerpo junto a mí se remueve al escuchar mi pregunta, pero no obtengo ninguna respuesta de su parte. -Rauth…-
-Mmmmm… Louis ya duérmete, ellos deben estar bien- Tras decir eso lo observo esconderse debajo de la ropa de cama, lo cual me provoca sonreír con ternura por la acción. El silencio del cuarto me hace regresar a mis pensamientos, ya ha pasado más de una semana desde que Daniel junto con Abelard y Leich se fueron donde Thomas y en todo este tiempo una sensación de intranquilidad me ha invadido. -No vas dormir ¿Cierto?-.

-Perdón Rauth, no quería…- Antes de poder decir algo más sale de su escondite y me atrapa entre sus brazos y acomodando mi cabeza en su pecho, permitiéndome poder escuchar el acelerado ritmo de su corazón. -No quería preocuparte…- Paso mis dedos por su pecho desnudo, siguiendo las marcas propias de su especie grabadas en su morena piel con lentitud.

-Intenta descansar.- Siento como besa mi frente y se acurruca apretándome a su cuerpo, cual niño pequeño abrazando a su peluche, lo contemplo dormir hasta que siento mis ojos pesados, me acomodo en su pecho y curioseo por última vez  la hora en el reloj de mi pared, son las cuatro de la mañana, al menos intentaré dormir un par de horas.
Un fuerte sonido me despierta de golpe, observo a mi alrededor buscando el origen, pero además de algunas prendas tiradas en el piso luego de la acción de anoche, no hay rastros de lo que pudo provocar ese estruendo, me acomodo nuevamente en mi cama notando que Rauth ya no está, en su lugar una hermosa flor adorna la almohada junto a mí, le encanta hacerme ese tipo de regalos y por supuesto yo acepto gustoso esos adorables gestos de su parte. Pongo mi atención en el reloj, son las dos de la tarde, continuo examinándolo sin lograr procesar la información en mi cabeza, hasta que la realidad cayó encima mío como balde de agua fría, me levanto de golpe y entro al baño para lavarme rápidamente, me tomó unos quince minutos estar listo. Al salir del cuarto puedo notar el olor de algo quemándose en la cocina y también encontré el origen del fuerte ruido, la bonita mesa de madera del comedor estaba partida por la mitad junto con un montón de sillas rotas.

-Buenas tardes Louis, parece que la acción de anoche te agotó bastante- Le dedico una mirada de furia a Ethan mientras éste sale de la cocina, puedo notar la maldita sonrisa de burla en su rostro y maldigo internamente  el momento en que nos pilló besándonos en el sillón hace un par de días atrás.

-Estas provocando un incendio Ethan, desde aquí puedo sentir el olor a quemado-

-Calma, fue solo un poco-

-¿Me puedes explicar que sucedió aquí?-

-Gabriel y Rauth comenzaron a competir por quien era más fuerte, ahora deben seguir compitiendo afuera en el bosque, ya sabes cómo son- Lo observo regresar a la cocina y escucho otro fuerte estruendo junto con el sonido de un árbol cayendo, me dirijo a la entrada de la casa molesto y antes de poder dar un paso fuera de esta, un enorme tronco cae enfrente mío.

-¡Hey, ten cuidado!- Noto a Rauth llegar a mi lado, quitando el enorme tronco de la pasada, mientras le dedica una mirada de fastidio a Gabriel.

-¡Perdón Louis, no te vi!- Escucho gritar al hombre lobo mientras corre hacia mí para comprobar si me encontraba bien.

-Se puede saber… ¿¡Qué rayos están haciendo!?- ambos cruzan miradas por unos segundos y luego miran el desastre provocado por ellos mismos. -¿Y bien?-.

-Estábamos… Cambiando la decoración del lugar- La respuesta de Gabriel y la sonrisa por parte de ambos provoca que me hierva la sangre y ellos parecen notarlo, el aire a nuestro alrededor se vuelve denso y los árboles comienzan a crujir con mi energía. Odio usar magia oscura, lo detesto con todo mi ser, pero es parte se mi naturaleza y hay veces, como esta ocasión, en que simplemente no puedo controlarme.

-¡¡¡Chicos miren lo que encontré!!!- Ethan rompe el ambiente al empujarme para poder llegar donde el par de desastrosos y si no fuera por Rauth hubiera terminado con la cara en el piso.

-Ups, perdón Louis- Le dedico una mirada de odio puro, hasta notar lo que trae en las manos.

-¿De dónde sacaste eso?- Me sonríe de forma traviesa en forma de respuesta, lo cual no es nada bueno.

-Encontré la reserva secreta de Abelard- Su sonrisa se hizo aun más amplia al levantar las botellas de licor en que trae en sus manos. Subo mi mirada hasta el rostro de Rauth el cual esta sonriendo de manera cómplice con Gabriel, esto definitivamente no es nada bueno.

Despierto con un horrible dolor de cabeza y de cuerpo, junto a mi esta Rauth abrazándome casi protectoramente como siempre lo hace, unos metros más lejos esta Ethan tirado en sillón durmiendo y babeando un cojín, para mi sorpresa Gabriel está detrás de el abrazándolo, quien diría que alguna vez pillaría a estos dos durmiendo juntos y tan pegados, harían una muy linda pareja juntos aun que les va a durar sólo hasta que despierten.
Dejo de prestarles atención para intentar liberarme del agarre de mi amante, me tomó más de lo pensado pero luego de mucho esfuerzo estoy libre, sin que Rauth lo notara, me siento a su lado y contemplo el desastre que habíamos provocado, nos quedamos dormidos junto a la chimenea luego de pasar toda la noche bebiendo y jugando cosas que apenas recuerdo, en lo personal prefiero que se queden en el olvido. Me levanto lentamente mientras escucho crujir como cada hueso de mi cuerpo por haber dormido en el piso, vuelvo a observar a mí alrededor y suspiro de forma escandalosa, sólo espero que Abelard y el resto no vuelvan pronto y se encuentren bien.
Claro está que al destino le gusta jugar con mis sentimientos, apenas doy unos pasos en dirección a la cocina escucho el sonido de la puerta abrirse, me quedo paralizado en mi puesto mientras Danny, Leich y Abelard entran en la casa, siendo los dos últimos quienes se quedan estáticos al ver el estado de esta.

-Buenos días Louis- Me dice Danny al pasar junto a mí y posteriormente encerrarse en su pieza, lo cual me parece bastante raro, pero tengo otra cosa de lo que preocuparme ahora.

-Ammm… ¿Bienvenidos?- Sonrío entre tímido y asustado, mientras que con un pie intento despertar a Rauth.

-¿Qué fue lo que sucedió?- Siento los ojos de Leich sobre mí, levanto la vista y noto que sus ojos brillan, parecen verdaderos témpanos de hielo.

-Yo… Bueno…- Puedo ver el vapor que produzco al hablar, producto de la baja repentina en la temperatura. -¡Intente hacerlos entrar en razón, pero les dije que no me escucharían si me dejaban a cargo!- La mirada del Nekium se torno aun más molesta con mi respuesta lo cual me pone extremadamente nervioso, podía sentir como el frio se colaba lentamente por mi cuerpo.

-¡¡MIS BEBES!!- El grito de Abelard nos hace pegar a ambos un pequeño brinco por la impresión. -¡¡Mis bebes están vacios!!- Observo como el cazador, abraza un montón de botellas vacías en el suelo, ahora que lo recuerdo Ethan mencionó algo sobre una reserva secreta.

Un fuerte tirón me hace caer al suelo y ser nuevamente prisionero de los brazos de Rauth, al parecer tiene frio y busca el calor en mi cuerpo.-Rauth, despierta por favor- Le susurro en un intento de poder despertarlo.

-Mmmm… Aún es muy temprano amor, déjame estar así un poco mas- Me sonrojo al escuchar la palabra amor salir de su boca, sonrío como tonto por unos segundos hasta recordar toda la situación.

-Es importante, en serio debemos levantarnos-

-Oh, vamos solo vuelve a dormir- Siento su mano colarse por debajo de mi camisa mientras esconde su rostro en mi cuello, el calor que desprende su cuerpo es tan reconfortante que me llega a adormilar un poco, hasta que un enorme cristal de hielo aparece entre nosotros obligándonos a separarnos. Escucho un fuerte ruido a mis espaldas a lo cual volteo notando que el sillón en donde Ethan y Gabriel dormían plácidamente, se encontraba completamente dado vuelta por otro cristal de hielo.

-¡Maldito Leich, mira lo que acabas de hacer!- Siento las manos de Rauth toman suavemente mis brazos y es cuándo por fin noto que brota sangre de ellos, al parecer el cristal es un tanto filoso.

-¡Mira el desastre que provocaron Rauth, su deber era cuidar la casa!-

-¡¡La casa está bien, solo necesita un poco de limpieza, no es razón para que llegues y hagas un escándalo!!- Observo a Rauth levantarse molesto y acercarse a Leich, los ojos de ambos destellan producto del enojo. En un momento y sin que pueda hacer algo para evitarlo, Rauth toma fuertemente de la ropa al Nekium, levantándolo incluso un poco del suelo, observo a Abelard levantarse del suelo e intentar separarlos pero pare una tarea inútil.

-¡No te atrevas a tocarme Rauth, suéltame de una vez!-

-¡¡Lastimaste a Louis!!-

-¡Fue solo un rasguño, no morirá por eso!- Un rasguño del cual por cierto brota mucha sangre. Al mirar el liquido rojo brotar de mis brazos fue que reaccione, Ethan aun estaba dentro de la casa, volteo rápidamente para buscarlo pero ya era tarde, Veo en cámara lenta como Ethan se arroja en contra mío, provocando que golpee fuertemente mi cabeza contra el suelo, siento como el golpe me aturde un poco, pero aun así intento poner resistencia en contra del vampiro.
 ¿Alguien me puede explicar, en qué momento todo se salió de control en esta casa? Un fuerte golpe de energía me saca de mis pensamientos. No sé cuánto tiempo habré estado aturdido  pero Ethan ya no estaba sobre mí, sino que en los brazos de Gabriel luchando con todas sus fuerzas por soltarse, Rauth está junto a mí, con una expresión de preocupación en su rostro que no puedo soportar, acaricio su rostro intentando tranquilizarlo, pero solo logro afligirlo aun más con el dolor de mis brazos.
Puedo sentir una extraña energía junto a mí y es cuando al fin me doy cuenta de la otra presencia extraña observándome con unos grandes ojos carmesí, ojos muy parecidos a los de Danny si no fuera por el color, ahora que lo observo bien… ¡El chico junto a mi es idéntico a Daniel! Aun que solo en sus rasgos físicos, ya que a diferencia del muchacho, la piel de este chico era completamente negra al igual que su ropa, y el resto de sus cosas, excepto por esos ojos, Ese par de rubíes contrasta perfectamente en su rostro. Curioso estiro lentamente mi mano hacia la suya, pero mi sorpresa se hace aun mayor cuando la traspaso, como si el chico no existiera.

-No tiene cuerpo físico, es solo una sombra que se materializa por energía- La voz de Danny me toma por sorpresa, al igual que notar mis brazos completamente sanos y sin ningún dolor.

-Gracias Danny- Le digo mientras me incorporo con la ayuda de Rauth.

-No fue nada, ¿te sientes bien?-

-Mucho mejor gracias a ti- Siento como mi querido Kratuk me aprieta contra su cuerpo y lo observo mirar agradecido al pequeño. -Danny, que eso de una sombra-

-Oh! ¿Te refieres al chico junto a mí?… Pues, es mi sombra, mira- Lo observo señalar el suelo, notando que efectivamente su sombra ya no está.

-¿Como…?-

-Es una larga historia, que tal si ordenamos un poco para que se las pueda contar- Nos miramos durante unos segundos con Rauth para luego aceptar la oferta de Daniel.
Limpiar nos tomo solo un par de horas con mi magia y la ayuda de todos, aun así el ambiente se mantenía tenso, Abelard se fue con Leich para hablar sobre lo sucedido y Gabriel aun no aparecía con Ethan, pero dudo que aparezcan en unas cuantas horas más hasta que por lo menos el vampiro pueda volver a controlarse por completo.
Termino de ordenar los sillones para así poder sentarnos a hablar, no pasa más de 5 minutos cuando Rauth se acerca con una bandeja llena de dulces y 3 tazas con chocolate caliente, la cual deja sobre una mesita de centro para luego sentarse junto a mí en el sillón, Danny no tarda en llegar junto con su clon exacto siguiéndolo para todos lados.

-Jajaja parece un pollito siguiendo a su madre- No puedo evitar reír con el comentario de mi pareja, a lo que Danny reacciona tomando un sutil color rojo en sus mejillas y su sombra contemplándonos curioso.

-Su nombre es Lown, o al menos eso me dijo-

-¿Puedes hablar con el Danny?- Le pregunto mientras tomo una de las tazas para calentar mis manos con ella.

-Algo así, puedo escucharlo en mi cabeza, aun que no dice mucho-

-¿Como apareció?- La expresión de Daniel se puso seria tras la pregunta de Rauth, se toma su tiempo para respondernos, sentándose frente a nosotros y jugando con sus dedos es que comienza el relato de todo el viaje y de cómo se topo con un extraño chico en sus sueños. Continuo hablando sobre el ataque que sufrió por parte del Totub y como despertó posteriormente en la mansión de Thomas, nos relató cada sueño que tuvo con el chico ahora llamado Neithel y como este lo alejaba de sus pesadillas, no pasa desapercibido para Rauth ni para mí como el tono de voz y las expresiones de Daniel cambian al mencionar al extraño, por un momento se detuvo en su relato y toco sus labios, puedo notar como de sus ojos se asoman las lagrimas que lucha por contener, respira hondo y nos relata de cómo a pesar de negarse intentaron bloquear la conexión que tenia, parece ser que no tuvieron éxito gracias a que Lown intervino. Cuando despertó Abelard le explico que lo había sucedido durante el ritual y tuvo una discusión bastante grande con Leich y Thomas, se marcharon de la mansión el mismo día y esa noche las pesadillas habían vuelto con más fuerza y crueldad que antes, por un momento tuvo la esperanza de que si su conexión con las pesadillas se mantenía, entonces también seguiría la de Neithel, pero no fue así, ya no había podido volver a ver o hablar con él. Con respecto a Lown, aparecía cada vez que Daniel estaba triste o necesitaba de ayuda, es un protector o guardián, al menos eso le había dicho a Danny, parece que la relación entre Danny y Leich está bastante tensa porque la sombra no deja ni siquiera que el Nekium se acerque a su protegido. Al terminar su relato las lágrimas ya corren libremente por su rostro y Lown había vuelto a ser la sombra de Daniel.

-¿Es posible… Extrañar tanto a  alguien  que apenas conoces de hace unos pocos días?- El dolor en las palabras de Danny era notorio, me acerco a él y arrodillo para mirarlo fijamente, limpio sus lagrimas y lo abrazo en silencio, el me responde el abrazo y comienza a llorar sin contenerse en mi hombro. -Lo extraño Louis, lo extraño mucho- Con cada palabra lo siento temblar y apretarme aun más. -Extraño su tranquilidad, su mirada, su sonrisa, su voz… El debe estar tan solo, necesito encontrarlo, el me necesita…-.

-Daniel…- Escucho.la voz de Rauth junto a mí, lo veo arrodillarse y desordenar el pelo de Danny. -Oye, te ayudaremos a buscarlo- Siento que el abrazo se vuelve más suave y por fin levanta su rostro para poder mirar a Rauth.

-Yo intentare hacer lo posible para alejar tus pesadillas y recuperar la conexión con Neithel, haré mi mejor esfuerzo Danny te lo prometo- Nos mira sorprendido, con ayuda de Rauth seco las lagrimas de su rostro y le paso un pañuelo.

-¿Enserio…? ¿Me ayudaran?- Cruzamos miradas con Rauth y sonreímos en forma de respuesta.

-Vamos a hacer nuestro mayor esfuerzo Danny, lo prometemos- Daniel sonríe al escuchar las palabras de Rauth y nos abraza a ambos.

-Gracias… De verdad-

-Bien, ya está oscureciendo, iré a buscar al resto ustedes dos vayan a descansar fue un día demasiado agotador-. Asentimos con la cabeza mientras lo observamos dirigirse a la salida, rápidamente me levanto y despido a Rauth en la puerta pidiéndole que tenga cuidado, el bosque por la noche es un lugar muy peligroso aun para un Kratuk. Lo veo alejarse hasta perderse en la oscuridad, me quedo unos minutos más en la puerta hasta que el frio me obliga a entrar.

-Son las 10, ¿quieres hacer alguna cosa? No tengo ganas de ir a dormir aun- Danny esta aun sentado en un sillón, bueno sentado no sé si sea la palabra ya que su cabeza cuelga en donde deberían estar los pies.

-Jajajaja, puedo notar lo aburrido que estas Danny- Frunce el ceño ante mi respuesta lo que me provoca seguir riendo. -¿Quieres ayudarme con unas pociones?- Su expresión cambia inmediatamente con la invitación y en unos pocos segundos ya estaba parado junto a mí con la emoción en su rostro.

-¡¿De verdad puedo ayudarte?!-

-Por algo te lo estoy diciendo…-

-¡Nunca me habías dejado ayudarte!-

-Es porque eras muy pequeño, podías causar un desastre- Comienzo a caminar hacia mi cuarto con Daniel siguiéndome notoriamente feliz, llegamos a la puerta y noto algo interesante. Volteo a ver de frente a Danny el cual ahora me mira curioso porque aun no abro la puerta.

-Quédate quieto Danny- Llevo mi mano a su cabeza para comparar alturas y mi impresión era correcta. -Creciste bastante pequeño, jajajaja llegara el momento en que ya no te podremos decir así- 

-¿Enserio crecí?- Sus ojos brillan emocionado. -¡Eso quiere decir que estoy por alcanzarlo!- Le sonrió y abro la puerta para así poder entrar a mi cuarto.

-¿Te refieres al chico de tus sueños cierto? Neithel si no mal recuerdo-

-Sí, me solía molestar por mi tamaño y edad, quiero ver su rostro cuando descubra que soy más alto que el-

-Jajaja ¿Y cómo es él?- Le indico una silla junto a la mesa de trabajo a Danny para que siente mientras busco los materiales.

-Ammm… El es…- Volteo a observarlo, esta notoriamente sonrojado jugando con algunas herramientas de la mesa. -Su cabello es negro como el mío, pero mucho más largo y sedoso… Sus ojos son una combinación entre Azul y verde, siempre expresivos, cuando te mira sientes que analiza hasta tu alma, su piel es suave y blanca… Siempre estaba fría, como verdadera porcelana- Daniel parece perderse en sus pensamientos mientras recuerda a Neithel, me recuerda un poco a mí, cuando conocí a Rauth. -Sus labios también son muy bonitos y el lunar en su rostro también...- Coloco los materiales en la mesa y busco el libro necesario para trabajar, mientras escucho atento cada palabra de Danny.

-Se escucha como un chico muy atractivo-

-Demasiado… Además que desborda sensualidad en su forma de ser, siempre conseguía sonrojarme con sus comentarios-

-¿Qué edad tiene?-

-seiscientos cuarenta y nueve...- Con la respuesta el libro que traía en manos cayó estrepitosamente al suelo.

-Disculpa… ¿Qué?-

-Jajajaja también me sorprendí al principio-

-Vaya muchacho debe ser, sería interesante conocerlo… ¿De qué edad lucia?-

-Unos 20 o 21 años-

-¿No te dijo que era?-

-Nunca le pregunte…-

-Interesante… realmente me gustaría conocerlo- Puedo ver como la sonrisa de Daniel crece con mi respuesta.

-Te agradara, aun que es un poco… Mmm como decirlo… Ammm, se llevaria excelente con Ethan por su personalidad- Me expresión cambia inmediatamente, alguien igual a Ethan no es totalmente de mi agrado. -Tranquilo, tiene sus momentos de calma y disfruta de un buen tema de conversación-

-Tendría que conocerlo, para juzgar- Me siento junto a Danny y comienzo a explicarle las instrucciones de la poción que realizaremos, tenía un poco de dudas, pero luego de un rato Daniel se volvió en un excelente ayudante, atento y cuidadoso con cada movimiento que hacía, logramos terminar la poción rápidamente y con éxito. -Buen trabajo, me ayudaste bastante pequeño- Examino el liquido y lo guardo en una pequeña botella, junto con otras más en mi repisa.

-¿Que se supone que es?-

-Una poción de regeneración… Algo muy similar a lo que hace tu sangre- 

-¿Crees que funcione aun mejor si le pones un poco de mi sangre? Sería interesante de probar-

-Lo había estado pensando, pero… tendría que ver una forma de que la sangre no coagule y se mantenga en equilibrio con la poción- Anoto algunas ideas en un pequeño cuaderno y volteo a mirar la hora, son las 12 de la noche y el resto aun no llega, una parte de mi confía en que se puedan cuidar solos y otra la está realmente preocupada.

-Tranquilo, Rauth se sabe cuidar- Al parecer Danny noto mi preocupación, le sonrió y nos dirigimos a la cocina para preparar algunas bebidas calientes. En todo el rato Daniel comenzó a preguntarme algunas cosas sobre la mansión de Thomas, mi relación con los chicos de ahí y en especial con Joshua.

-Así que conociste a Joshua-

-Sí, es bastante agradable… ¡Ah! Y agradeció el paquete que le enviaste-

-Jajajaja, hace mucho que no lo veo-

-Me acompaño bastante en mi estadía en la mansión, jajajaja siempre se enojaba cuando mencionaba a Rauth, parece que no se llevan bien-

-Se detestan a muerte, intente por años que lograrán tener una buena relación, pero lo único que conseguí fue que ambos estén en el mismo cuarto que yo mirándose a muerte-

-Culpa a Rauth de que te fueras de la mansión- Me tomo mi tiempo en responder la acusación, comienzo a jugar con la cuchara de mi taza y a caminar hacia el salón para que Daniel me siguiera, al llegar nos sentamos en la alfombra junto a la chimenea encendida.

-En parte tiene razón, deje ese lugar porque me enamore de Rauth y también porque deseaba seguir mi camino de forma independiente, le agradezco mucho a Thomas el haberme recibido como su pupilo, pero llegó el punto en que mis prácticas no lo dejaban conforme, así que preferí irme y aprender por mi cuenta- 

-Es por lo de ser brujo ¿No?-

-¡Oh! Te lo contaron, jajaja si… Thomas no podía creer que desperdiciara el talento familiar en practicar magia blanca, pero yo no quiero ser como mi familia…-

-¿Qué sucedió con tu familia Louis?-

-No lo sé, deben estar viviendo aun en el palacio real del reino de Nainet-

-¡¿Palacio real?! ¡¿Nainet?! Ese no es el reino de las criaturas oscuras-

-El mismo lugar de donde Ethan viene, de hecho alcancé a conocer a la bestia que él tiene de hermano-

-¡¡¿Ethan tiene un hermano?!!-

-Sí, pero la relación entre ambos no es agradable, si alguna vez quieres saber esa parte de la historia debes preguntárselo a él directamente-

-Ya veo…Nainet está conformado gobernado por distintos reyes ¿Cierto?-

-Sí, mi familia es consejera del rey brujo del reino-

-Y… ¿Por qué te fuiste?-

-No encajaba en mi familia… Soy un hechicero, puedo manejar tanto la magia oscura como la blanca y el talento de la magia blanca era prácticamente una deshonra en mi linaje-

-Oh…- Nos quedamos en silencio durante un rato solo se escuchaba el crepitar de la chimenea. -Thomas me dijo que a pesar de que no estaba de acuerdo con tu decisión de dedicarte solo a la magia blanca… Esta muy orgulloso de ti y que eres y siempre serás su aprendiz estrella- Lo mire sorprendido, no pensé que Thomas me considerará aun su aprendiz, de repente me sentí nostálgico y realmente feliz, lo cual Daniel parece notar ya que me sonríe fiel.

-Pensé que estarían durmiendo…- Ambos volteamos sorprendidos al escuchar la voz de Rauth, el cual está parado junto a la puerta con el resto de la familia detrás de el.

-Bienvenidos a casa- Dice Daniel al verlos a todos, Ethan es el primero en correr a su dirección y apretarlo en un abrazo.

-¡¡Mi querido Danny!! ¡¡No sabes cuánto te extrañe!!- Por un momento la mirada del vampiro se cruza con la mía, un escalofrió recorre mi cuerpo al recordar el ataque de esta mañana. –Louis… Lo siento mucho, de verdad no quería lastimarte- Me sorprendo ante la expresión de arrepentimiento con la cual me mira, nunca pensé en ver a Ethan pedirme disculpas de forma tan sincera.

-Ya paso Ethan, tranquilo estoy bien- Me sonríe agradecido, para volver toda su atención a Daniel.

-Díganme que hay algo de comer, muero de hambre- Abelard es el ultimo en entrar acompañado de un callado Leich.

-No hay mucho Abelard, unas cuantas sobras del almuerzo- Le respondo mientras me levanto a servirle un plato. –Tampoco queda mucha comida en la bodega-.

-Eso quiere decir que mañana tendremos que ir al pueblo por suministros- Automáticamente todos volteamos a mirarlo y gritar “Pueblo” a la vez, no podemos ocultar nuestra emoción en poder visitarlo, pocas veces tenemos permitidos en alejarnos demasiado de la cabaña, es uno precio que hay que pagar por vivir como uno de los chicos de Abelard. Estamos bajo su custodia, si algún cazador nos pilla sin Abelard cerca nuestro nace el caos. –Louis serias tan amable de ayudar a Leich a escribir una lista con las cosas que necesitamos-.

-Si no hay problema- Me acerco rápidamente al Nekium para que me siguiera a la bodega donde guardamos la comida, siento como Rauth nos observa atento bajar hacia el oscuro cuarto. Ocupo un poco de magia para encender la luz en la habitación y poder encontrar un cuaderno en donde anotamos todo lo necesario.

-Perdóname Louis, me excedí y por mi culpa te lastimaron…- Lo contemplo mientras juega con su blanco pelo, parece pensar seriamente las palabras que me dirá. –Primero obligo a Daniel a hacer algo que no quiere y por lo cual me odia… Y ahora por mi descontrol te lastime y Rauth ya no quiere dirigirme la palabra-

-Todos cometemos errores Leich, a Rauth se le pasara tarde o temprano sabes como es y Daniel no durara mucho mas enojado contigo, te adora y lo sabes- Le sonrió lo cual parece tranquilizarlo un poco. Nos tomo solo 30 minutos hacer la lista, apenas la terminamos subimos encontrándonos con el lugar vacio, al parecer todos fueron a dormir, nos despedimos y dirigimos a nuestros respectivos cuartos, mañana nos levantaríamos temprano para visitar el pueblo. Al entrar a mi cuarto observo un bulto en mi cama, sonrió y me meto lentamente en ella.

-¿No deberías cambiarte de ropa antes de dormir Louis?-

-Pensé que querrías ayudarme con eso- Escucho a Rauth reír, acaricio su rostro y él me besa apasionadamente. –Es tarde, debemos dormir- Siento sus manos colarse en mi ropa y sacarla fácilmente.

-Aun podemos jugar un poco- Sus manos bajan lentamente provocando que tiemble ante la deliciosa sensación.

-Está bien, pero solo un poco- Lo beso suavemente mientras él me voltea para quedar sobre mí, me sonríe y susurra un “Te amo” que me hace estremecer, es definitivamente una buena forma de cerrar un día tan caótico como el de hoy.

Son las 5 de la tarde, me encuentro recorriendo algunos puestos del pueblo junto con Rauth y Gabriel, Daniel esta más adelante con Ethan hablando sobre algo que compraron. Salimos temprano de casa, aun no sé como logre levantarme luego de la sesión de anoche, Rauth puede ser realmente salvaje cuando quiere y terminamos durmiendo apenas unas cuatro horas, las ojeras son notorias bajo mis ojos violetas, nunca me ha gustado el color de mis ojos pero a Rauth y al resto parecen fascinarles.

-Chicos no se alejen demasiado, recuerden que debemos juntarnos con Abelard en la entrada del bosque en una hora más-

-¡Lo sabemos!- Me responden el unisonó Ethan y Daniel, suspiro cansado por tanto caminar y me dedico a contemplar el cielo, parece ser que se acerca una tormenta, espero no la pillemos camino a casa. Una pequeña explosión nos hace ponernos alerta a todos, parece venir del centro del pueblo.

-¿Qué rayos fue eso?- Niego con la cabeza, dándole a entender a Gabriel que simplemente no la sabia y tampoco quiero saberlo. Vemos correr a un grupo de personas cubiertas con una capa y detrás de ellos un grupo de cazadores. -¡Oh, Genial mejor vámonos antes de que dirijan su atención a nosotros!- Le damos la razón al licántropo y nos alejamos lentamente intentando pasar desapercibidos, pero un par de cazadores jóvenes parecen notar nuestra presencia, fijando su atención principalmente en Daniel.

- Rauth…-Intento avisarle sobre los tipos pero el solo me toma de la mano para que apresure el paso.

-Si lo sé, ya los vi- Llegamos a la entrada del bosque, pero aun no hay rastro de Abelard, decidimos continuar nuestro camino para así quitarnos a los cazadores de encima, logramos llegar cerca del rio cuando Gabriel cae el piso con una notoria expresión de dolor, lo examino notando una flecha con un extraño símbolo clavada en su pierna.

-¿Donde creen que van?- Los cazadores lograron alcanzarnos y ahora nos amenazaban con sus armas dándonos a entender que si intentábamos algo, nos atacarían sin dudar. –No sabes cuantos problemas has causado mocoso- El cazador con el arco miraba realmente enojado a Daniel, mientras que el otro se acercaba amenazante hacia él.

-De que están hablando no hicimos nada- Ethan se interponía entre el cazador y Daniel. –Solo paseábamos tranquilos por el pueblo hasta que escuchamos una explo…- El cazador no dejo que Ethan terminara de hablar, dándole un fuerte golpe en el estomago que lo tiro al suelo.

-¡¡Ethan!!- Daniel intenta ayudar al vampiro pero el cazador lo agarra del cabello y lo obliga a mirarlo. Rauth intenta moverse pero el otro cazador lo miraba apuntándome a mí con el arco, era claro el mensaje, si el intentaba algo yo moría.

-Nos encargaremos de que pagues por todo los problemas que nos has traído mocoso-

-¡¡Auch!! ¡¡Yo no he hecho nada!!-

-¡Te vimos sacar a tus amiguitos de la cárcel, ahora veras como tus acompañantes mueren frete a tus ojos-

-¡¡No esperen!!- Observo como el cazador del arco tensa la cuerda listo para disparar sin darle importancia a los gritos de Daniel rogando para que se detuviera, cierro mis ojos esperando el golpe que nunca llega, en cambio escucho los gritos de los cazadores, intento abrir mis ojos para saber lo que sucede pero Rauth me lo impide cubriendo mis ojos con sus manos.

-No querrás verlo- Me susurra en el oído, pasa poco tiempo cuando siento que los gritos se alejan y Rauth me permite ver de nuevo, puedo observar el pasto y la nieve cubiertas de sangre, volteo rápidamente para mirar a Danny el cual está siendo abrazado por uno de los tipos que estaban cubiertos por una capa.

-¡Oh! Daniel, mi querido Daniel, pensé que nunca que te volvería a ver- Danny estaba notoriamente sorprendido, con los brazos a sus lados sin saber qué hacer. –Pensé que habías muerto, ya han pasado 9 años y no logre encontrarte-

-Espera… ¿Qué?- Daniel rompe el abrazo de golpe y da unos pasos atrás alejándose del desconocido.
– ¿Quién eres y como me conoces?-.

-¿No me recuerdas? Hace nueve años, la mansión en donde vivíamos fue atacada, intentamos huir y tú caíste por un acantilado directo al rio, te busque por años sin éxito y ahora estás enfrente mío- Si Daniel estaba sorprendido, nosotros estábamos con un pequeño ataque de pánico el ver como el desconocido se quitaba su capa y era una copia exacta a Danny, con el cabello más largo y un poco más alto. –Hermano, ¿en verdad no me recuerdas?- Al escuchar la palabra hermano de parte del chico una extraña sensación recorrió mi cuerpo, es como si mi magia intenta advertirme sobre algo. Un fuerte trueno anuncia el inicio de la tormenta y algo me dice que la tormenta también acaba de llegar a nuestras vidas.


~Yuu~





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